Artículo #56
TPP-11: ¿Beneficios para Chile?
El tratado es altamente complejo por la diversidad de materias que aborda, lo que dificulta un diagnoÌstico simplificado. Contiene 30 capÃtulos, que van desde comercio electrónico hasta transparencia y anticorrupción, pasando por temas laborales, medio ambiente, cooperación y competencia. En el primer punto del Preámbulo del TPP-11, se indica: “Establecer un Tratado regional integral que promueva la integracioÌn econoÌmica para liberalizar el comercio y la inversioÌn, contribuir al crecimiento econoÌmico y beneficios sociales, crear nuevas oportunidades para los trabajadores y los negocios, contribuir a elevar los estaÌndares de vida, beneficiar a los consumidores, reducir la pobreza y promover el crecimiento sostenibleâ€. Por lo tanto, la intención es que este acuerdo sea conveniente para desarrollar el potencial de todas las partes que lo firman. Como es obvio, un tratado internacional firmado por Chile, no puede contener nada que vaya en contra de la Constitución PolÃtica del Estado y el ordenamiento legal vigente. Asimismo, también debe armonizar con los acuerdos internacionales ya firmados por el paÃs, en el marco de la OMC y de otros tratados.
Texto destacado
La estrategia de Chile es coincidente con la presencia comercial en el mundo y el Asia-Pacifico es uno de los territorios con más proyección, pensando en las dinámicas de China e Indochina.
Este punto es importante, ya que circulan algunas noticias de que "Chile prácticamente perderá su autonomÃa y soberanÃa de sus decisiones", o "que las empresas deberán someterse a dictados de otros paÃses", "que las semillas nativas dejarán de ser de los obtentores", y otras ensoñaciones por el estilo. Un acuerdo internacional tiene implicancias y establece compromisos que cada paÃs debe cumplir. Lo más probable es que existan sectores de la economÃa que se vean más beneficiados que otros. Pero, es justamente el nivel polÃtico, el que permite tomar una mejor decisión, aquilatando la conveniencia del paÃs en general. Chile ha decidido de manera estratégica insertarse y proyectarse en el comercio exterior, como lo han hecho paÃses como Bélgica, Los PaÃses Bajos, Singapur o Corea del Sur, con gran éxito. Las exportaciones han sido el motor de la economÃa chilena y han permitido pasar de un PIB per cápita de US$ 2.300 a US$ 15.000 a precios constantes, entre 1990 y 2019 (Banco Mundial, 2020).
Según la DIRECON, más de tres mil productos que Chile envÃa a los mercados de los paÃses firmantes, mejorarán sus preferencias arancelarias.
Estos productos, tendrÃan más y mejores oportunidades de exportación a estos paÃses. Debido a rebajas o arancel cero; además de otros productos que hoy están bajo tratados bilaterales que fijan elevados aranceles de importación, cuotas de importación, extensos calendarios de desgravación o otros están sujetos a ventanas de ingreso (tipo marketing order). Esta es una pieza fundamental para el desarrollo de los paÃses. Sin inversión no hay empresas, sin empresas no hay productos o servicios, y por consiguiente, no hay empleos. Parte de esta inversión en un paÃs como Chile, con una economÃa abierta, es extranjera. Las disposiciones del capÃtulo 9 sobre inversiones del TPP se caracterizan por contemplar varias de las obligaciones consagradas en distintos acuerdos comerciales, como el trato nacional y de nación más favorecida. Como resulta lógico, se trata de conformar un contexto donde las normas se han desarrollado de forma más completa con el objeto de otorgar más garantÃas y seguridades al inversionista extranjero y a su inversión.
TPP-11 y la inversión extranjera.
Esto es válido para inversionistas extranjeros en Chile como de capitales chilenos que inviertan en los paÃses del TPP-11, es decir son reglas para todos los paÃses por igual. Es decir, hay un cierto principio de balance. El Estado no puede renunciar ni comprometer su rol como promotor activo del desarrollo del paÃs. Los paiÌses con mayor desarrollo tecnoloÌgico han llevado adelante de manera sistemaÌtica poliÌticas industriales. Se destacan Japón, los paÃses del sudeste asiático, y más recientemente China que ha implementado con fuerza, diversos instrumentos para promover un crecimiento orientado hacia mayor intensidad en tecnologÃa.
TPP-11 y la polÃtica pública de fomento productivo
Desarrollo productivo, polÃtica industrial, diversificacioÌn o transformacioÌn productiva, “cualquier tipo de intervencioÌn o poliÌtica de gobierno que intente mejorar el ambiente de negocios o alterar la estructura de la actividad econoÌmica hacia sectores, tecnologiÌas o tareas que se espera ofrezcan mejores perspectivas para el crecimiento econoÌmico o el bienestar social que los que ocurririÌan, sin dicha intervención†(Cabrera, 2019). Si bien las crÃticas con relación a las limitaciones de poliÌticas pro-desarrollo son ciertas, en la medida que dichas limitaciones estaÌn efectivamente expresadas en el tratado, existe tambieÌn un importante marco de salvaguardias determinadas en excepciones, exclusiones, reservas y aclaraciones a pie de paÌgina hechas por Chile, en ciertas materias y aÌreas, que generan un marco normativo de proteccioÌn a las facultades regulatorias del Estado, y que ante la eventualidad de una demanda por infraccioÌn a las disposiciones del acuerdo alegadas de parte de un inversionista extranjero u otro Estado parte, deberaÌ ser estudiado caso a caso (Cabrera, 2019).
La presencia activa de Chile en la cuenca del Asia PaciÌfico es una prioridad de poliÌtica exterior de alto consenso interno. Mantener nuestra presencia activa en instancias multilaterales adquiere una importancia central. Junto a ello, el despliegue de iniciativas de base regional como la Alianza del PaciÌfico, deben ser mecanismos que den expresioÌn concreta a esa prioridad (Furche, 2013).
En este sentido, sin dudas que hay que observar el conjunto de tratado, desde una perspectiva polÃtica y no solo de uno u otro subsistema sectorial, como: semillas, medio ambiente o patentes. No hay que olvidar que todos los tratados internacionales se consideran como aprobados en el proceso constituyente. No hay plazos perentorios para la aprobación y Chile tiene convenios con casi todos los paÃses que integran el TPP-11. Quizás lo correcto sea esperar a que culmine el proceso y evaluar.