Artículo #44
E-commerce como alternativa a la pandemia
La pandemia del Covid-19 y las prolongadas cuarentenas hicieron que la industria del vino tuviera que adaptarse a este nuevo escenario. Es por esto, que el E-commerce apareció como una opción para aquellos que pueden sostener este sistema, como una forma de venta, y asà intentar mantener a sus consumidores durante estos meses de crisis económica y social. A pesar de que restaurantes, bares y locales de venta, en general, estuvieron la mayor parte del año cerrados por la pandemia, esto ha generado un cambio en el consumo, que ha provocado que los clientes, en busca de mejores precios, compren directamente en los portales de las viñas o productores. Cuestión que se relaciona con la evidente imposibilidad de los consumidores de salir de sus casas producto de la pandemia. Según el reporte de Coronavirus en el paÃs, de Vinos de Chile de junio de 2020, se señala que: “El delivery de bebidas con alcohol se mantiene al alza durante el confinamiento. Según datos de la empresa VTEX, la venta online de estos productos creció un 973% durante la última semana de mayo de este año."
Texto destacado
Esta dinámica de comercialización ha permitido que las viñas -que han podido adaptarse durante la pandemia- tengan la opción de liquidar saldos de manera más rápida.
Y se agrega que “para ahorrar (los) clientes están comprando al por mayor†y directo a las marcas. Los compradores están optando por los e-commerce directo de los productores, para conseguir mejores precios al prescindir de intermediariosâ€.
Según una reciente publicación del diario La Tercera, este cambio de estrategia ha desencadenado un mejoramiento en las ventas en este ámbito en comparación con años anteriores. Esta tendencia “se reflejó en los balances del segundo trimestre de las tres principales empresas del sector, que superan el 80% de participación en el mercado interno: Concha y Toro, Santa Rita y San Pedroâ€. Esta última reportó un aumento del 7,7% en sus ventas versus el mismo lapso de 2019, pese a una disminución de 2,6% en los ingresos generados por las exportaciones. Esto, gracias a un aumento del 9,3% en las ventas en el mercado doméstico chileno. Mientras, desde Santa Rita detallan que sus ventas valoradas del mercado nacional, tanto de Viña Santa Rita como sus filiales, alcanzaron los $37.406 millones, lo que implicó un crecimiento de un 2,8% respecto de igual lapso de 2019.
Por su parte, Concha y Toro destaca que “sus ventas en el mercado local aumentaron en 6,8% en relación con el mismo trimestre de 2019 producto de un alza de 3,8% en volumen y de 2,7% en el precio promedioâ€. Esta dinámica de comercialización ha permitido que las viñas -que han podido adaptarse durante la pandemia- tengan la opción de liquidar saldos de manera más rápida respecto de aquellas viñas de mediano tamaño o de pequeños productores. Esto, como resultado de ciertas estrategias de premiunización de algunos vinos apuntando a una visión de exportación en los principales paÃses consumidores de vino chileno y/o quienes son socios comerciales, que como hemos visto, son EE. UU., Reino Unido, China y Brasil como los más destacados. Existen dos casos especiales a considerar: China y Estados Unidos. En el primero, según la estrategia de ProChile, dada a conocer en marzo de este año se tomó en cuenta que el paÃs asiático presenta un escenario “con un alza de precios, menos rutas de barcos, carga aérea cancelada y retail con ventas deprimidas, pero con los mercados mayoristas reactivándose y un aumento sostenido de las ventas por e-commerceâ€.
Y en segundo lugar, la misma publicación indica que “permanece aún con sus puertos funcionando, pero con una disminución de carga, bajo abastecimiento en general y también con aumento en los despachos a domicilioâ€. Se establecen dos claras lÃneas a desarrollar por las viñas durante el perÃodo pandémico y de post-pandemia.
• Potenciamiento de canales de comunicación, sitio web y redes sociales para la difusión y venta de sus productos.
• EnvÃo y recepción: preocupación por parte de la industria de cómo acercar el negocio a un público más joven y conectado con la tecnologÃa y, por ende, conocedor de las nuevas plataformas de difusión. Es esperable que las viñas y/o productores de menor tamaño tengan ciertas complejidades para sumarse a esta tendencia.
Esto, producto de que muchas dependen de la venta a hoteles y restaurantes que, a su vez, han tenido que cerrar sus puertas, por las restricciones sanitarias para evitar contagios.
No es de extrañar que los resultados de fin de año pensando en la temporada 2021 sean disparan en los productores pensando en el tamaño de la viña. Quienes son medianos y pequeños trabajadores del vino nacional han debido afrontar ciertos problemas en la distribución por lo que sumarse al sistema de venta on-line o e-commerce, es en sà misma una problemática a resolver. Esta cuestión, fue resuelta por las viñas más grandes, antes mencionadas, porque desde un comienzo presentaron canales de comunicación que facilitaron la venta y la liquidación de stock en sus bodegas.